A Solana le falta la estructura fundacional que servirá como infraestructura central para un “nuevo” sistema financiero global, según el miembro de la comunidad Ethereum y desarrollador de blockchain Ryan Berckmans. Si bien Solana inicialmente defendió un enfoque monolítico, gradualmente adoptó soluciones de Capa 2 (L2), a las que ahora se refiere como “Extensiones de red” en lugar de las tradicionales L2. Berckmans sostiene que este cambio de marca resalta la postura evolutiva de Solana hacia la escalabilidad, pero no alcanza la hoja de ruta centrada en L2 de Ethereum.
Berckmans señala que el desarrollo de la capa 2 de Ethereum ha atraído importantes aplicaciones para crear cadenas de aplicaciones L2 personalizadas en su red, incluido un importante equipo de desarrollo de Solana que recientemente se dedicó a construir una SVM (máquina virtual Solana) de capa 2 en Ethereum. En su análisis, describe las barreras estructurales críticas que enfrenta Solana para convertirse en una columna vertebral global viable para la cadena de bloques.
En primer lugar, Berckmans señala la dependencia de Solana de un único cliente de producción (Agave Rust). En comparación, una red troncal verdaderamente descentralizada requiere al menos tres clientes independientes, cada uno con participaciones equilibradas en la red. El cliente secundario de Solana, Firedancer, ha experimentado retrasos, en gran medida debido a la ausencia de una especificación de protocolo completamente desarrollada y de una comunidad de investigación sólida.
Otro problema son las importantes demandas de ancho de banda de Solana (recomendadas a 10 Gbps de carga), que plantean riesgos para la centralización y limitan la accesibilidad en diversos entornos globales. Además, el historial de interrupciones de la plataforma y la ausencia de mecanismos de respaldo a nivel de protocolo agregan riesgos operativos; por el contrario, la red de Ethereum puede seguir produciendo bloques durante los problemas de finalización.
La centralización económica es otro problema, añade Berckmans, destacando la alta asignación de información privilegiada de Solana, con el 98% de su oferta inicial de monedas distribuida internamente, en comparación con la distribución pública del 80% de Ethereum. El énfasis de la cadena de bloques en la escalabilidad de la ejecución L1 entra en conflicto con los avances a prueba de zk para las liquidaciones de Capa 2, que se adoptan cada vez más en los principales ecosistemas de cadenas de bloques.
Según Berckmans, la tendencia de la industria favorece el marco de trabajo de Capa 1 y Capa 2 de Ethereum, como lo demuestran las asociaciones con grandes corporaciones como Coinbase, Kraken, Sony y Visa. Estas alineaciones estratégicas subrayan la influencia de mercado de Ethereum sobre Solana, ya que el ecosistema holístico de Ethereum continúa atrayendo el interés de las entidades financieras globales.
A pesar de los logros de Solana en áreas como el crecimiento de las monedas meme y la apreciación de sus precios, Berckmans concluye que las limitaciones fundamentales de la plataforma le impiden servir como columna vertebral de una red financiera global.